lunes, 16 de enero de 2017

BIM en obra con Revit - II PARTE

En el caso concreto de este proyecto además del modelo del edificio en sí también se modeló la parcela recogiendo las condiciones existentes. Esto se conoce con el uso BIM de “Existing Conditions Modeling”, es decir, modelado de las condiciones existentes. Esto puede parecer insignificante en un proyecto pequeño, pero imaginad lo que puede suponer en una parcela grande con usos preexistentes, es imprescindible recogerlo en el contrato.

En el caso del proyecto que muestro en este artículo, se modeló teniendo en cuenta la totalidad de la parcela en previsión de posibles proyectos futuros en la misma. Las vistas, las instalaciones y la ocupación de las posibles edificaciones con respecto a los espacios libres fueron algunas de las cosas que tuvimos en cuenta con el modelo de manera preventiva.  La verdad es que ha sido gratificante ver cómo el mismo modelo y gran parte de sus estándares nos han servido para comenzar y terminar el proyecto turístico que realizamos después.
  • Visualización Renderizada (conveniente)

    Renderizar los modelos no está reconocido como un uso BIM en ninguna guía y, sin embargo, los clientes lo están solicitando cada vez con más frecuencia y es algo que afecta a nuestra forma de modelar. Que el 3d pueda obtenerse directamente del modelo implica un trabajo importante de texturas y materiales. Es posible que éste no se entienda como un uso BIM puesto que no añade en sí una información más allá de la visual.

Un buen renderizado no solo hace que el cliente visualice el proyecto con un lenguaje visual más familiar (3D y texturas realistas en lugar de planos a líneas). Los renders, además de ayudarnos a vender mejor nuestros proyectos nos sirven de apoyo a los técnicos para fijarnos en detalles que, sin proyección de luces y sin un recorrido virtual (recorriendo el proyecto como si estuviera construido), tardaríamos más en ver.

Una vez tenemos el modelo 3D realizado y organizado, que es el proceso más difícil, deberíamos ser capaces de aplicar materiales y luces al mismo con relativa facilidad. Si tenemos un modelo detallado y desperdiciamos esta oportunidad, tendremos que estar bastante más atento a los imprevistos en obra.

Algunos ejemplos de cómo los renders nos ayudan a no encontrarnos sorpresas en obra son las siguientes: Combinaciones de materiales de acabados, encuentros entre elementos constructivos que son difíciles de ver en planta o sección o la iluminación natural y artificial de estancias.
  • Ejecución (Meta)

    A este uso BIM se le conoce como “drawing generation”, esto significa que toda la documentación generada del proyecto debería obtenerse desde el modelo 3D. Con toda la documentación generada deberíamos poder ejecutar el proyecto con fluidez, e incluso modificar dicha documentación durante la obra si hay cambios imprevistos.
  • BIM “as built” (conveniente)

Es lo que se suele conocer como “Record Modeling”, es decir, que durante el proceso de la ejecución del proyecto éste puede sufrir cambios. Si el “record modelling” es un objetivo BIM estos cambios deberán reflejarse en el modelo BIM y finalmente el modelo debería ser un reflejo exacto de lo construído. El modelo BIM debería poder servir como fuente de documentación del proyecto “as built”. De hecho si este objetivo BIM es solicitado por el cliente, lo más probable es que el modelo sea un entregable en sí mismo, con toda su información asociada.

Dependiendo de lo bien organizado que esté el modelo BIM nos será más o menos fácil hacer las modificaciones que permitan que el 3D sea una representación lo más fiel posible de la realidad construida.


Fuente: especialista3d.com/bim-en-obra/

No hay comentarios:

Publicar un comentario